¿Eres de los que se han creído que los números de debajo del tetrabrick de leche indican las veces que ha sido "reciclada" y vuelta a comercializar? ¿O quizás te ha convencido el último hoax que te ha llegado de que el limón es 10.000 veces más potente que la quimioterapia?...
Quizás creas que todo lo etiquetado como "natural" es saludable o elijas unas alcachofas envasadas de una marca antes que otras porque en la etiqueta de las primeras indica "libre de colesterol"...
Puede que pienses que un producto que presente un 0% enorme y coloreado en su embalaje no engorda, o que es lo mismo tomar las 5 raciones diarias recomendadas de frutas y verduras de forma natural que dentro de esa botellita tan mona y tan cómoda que te asegura una "alimentación saludable" con el mínimo esfuerzo...
No te culpo, los bulos que se transmiten por internet, los mensajes engañosos de la publicidad, los titulares sensacionalistas de las revistas, parece que todo se alía para confundirnos pero, no te preocupes, creo que existe algo que podría minimizar la influencia de todos estos factores y aclarar muchas de nuestras dudas.
¿Quieres saber a que me refiero?